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La vida nos supera, nos sorprende y nos envuelve en mareas de acontecimientos que, en ocasiones, a veces incluso a menudo, nos bañan cuando menos lo esperamos, subiendo y bajando como las olas que cubren la arena de la playa en su incesante vaivén.
Escribimos nuestro camino según lo soñamos y Él la soñó antes de conocerla. Sabía cómo sería, qué sentiría, podía intuir lo que diría sin ni siquiera haber hablado con Ella antes. Pero no supo interpretar su sentido entonces y por siempre está condenado a recordar las palabras que le dijo aquella noche como si fueran una premonición:
Qué vendrá qué vendrá
Yo escribo mi camino
Sin pensar sin pensar
Dónde acabará
Aquella vorágine de sensaciones le hacía no poder vivir en aquel sinvivir. La perdió para siempre, desde que se fue nunca más la volvió a ver y, desde que se dio cuenta de que la había perdido, se decía a sí mismo: "qué importa dónde vaya, porque Ella está y estará en mi mente y en mi corazón hasta el fin de mis días".
"Dejar hablar a mi instinto me cura", es lo que Ella le dijo justo antes de desaparecer de su vida para siempre. Él no lo entendió entonces. Fueron tantas las cosas que no comprendió en su momento y que ahora le parecían estar claras como el agua cristalina.
Qué vendrá qué vendrá
Yo escribo mi camino
Si me pierdo es que ya me he encontrado
Y sé que debo continuar
Nunca supo a qué se refería o si tenía intención de volver, pero en aquellas palabras se intuía que tenía claro lo que tenía que hacer. "Amaré hasta mi último día, hasta mi último soplo de vida", dejó escrito en aquella nota de despedida. Al leerlas una y otra vez la pareció escucharla diciendo: "A dónde iré no lo sé, solo sé que lo haré sin pensar en el mañana." Y todavía creía oír el eco de su voz en la distancia y la lejanía del tiempo transcurrido.
Al final ese mañana resultó ser el que Ella nunca vivió con Él. Ahora sabe que penará de por vida por no haberla sabido mantener a su lado.
Qu'importe là où je vais
Tant que j’ai l’audace
De tenir la main de l’autre
Pour aimer le temps qui passe
Dans tout ce que je fais
La rage et l’amour s’embrassent
Qu’elle soit mienne ou qu’elle soit votre
La vie nous dépasse
Qué vendrá qué vendrá
Yo escribo mi camino
Sin pensar sin pensar
Dónde acabará
Dans mes joies, dans mes peines, dans mes choix, dans mes larmes
Je laisse aller mes sentiments
Au mieux on écrit son chemin comme on se soigne
Pour aimer indifféremment
Sur les sables mouvants d’un passé qui s’effondre
Je me raccroche à ceux que j’aime
Prenant soin de chaque seconde
Les heures prendront soin d’elles-mêmes
Qué vendrá qué vendrá
Yo escribo mi camino
Sin pensar sin pensar
Dónde acabará
Qué vendrá qué vendrá
Yo escribo mi camino
Si me pierdo es que ya me he encontrado
Y sé que debo continuar
Puisque nous sommes ici sans savoir
Ce qui nous attend un peu plus tard
Laisser parler mon instinct me guérit
Puisque tout cela est bien trop court
J’aimerai jusqu’à mon dernier jour
Jusqu’à mon dernier souffle de vie
Qué vendrá qué vendrá
Jusqu’où j’irai j’en sais rien
Sin pensar sin pensar
Sans penser à demain
Qué vendrá qué vendrá
Yo escribo mi camino
Si me pierdo es que ya me he encontrado
Y sé que debo continuar
Qué vendrá qué vendrá
Yo escribo mi camino
Si me pierdo es que ya me he encontrado
Y sé que debo continuar
Si me pierdo es que ya me he encontrado
Y sé que debo continuar
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